AZUL BILBAO
Según el diccionario la lengua bilbaina, el azul Bilbao tiene una fórmula precisa: una pizca de azul cobalto añadida a mogollón de añil y pelín de blanco titanio… y todo ello bien batido.
Para otros, es el color que ofrece el cielo del Botxo cuando, tras un día de lluvia, se unen tarde y noche y las nubes se alejan, otorgando perfecto broche. Su tonalidad es un tanto más luminosa que el ultramar de la industria textil. Tradicionalmente era utilizado por los bilbainos elegantes para distinguir el correcto tono de azul de su boina, usada por unos para diferenciarse de los de la txapela, refiriéndose a la gente sencilla, y por otros como signo de coquetería, por ser más favorecedor al peinar canas que la clásica negra.
“No tenemos nada contra el amarillo Nápoles, el Burdeos o el tierra de Treviso, pero nuestro color es, por supuesto, el azul Bilbao“
Lo que no cabe duda es que a partir de 1978 forma parte de la simbología festiva de la Villa, cuando la primera Comisión de Fiestas propuso la pañoleta azul Bilbao como distintivo oficial de la indumentaria de la Aste Nagusia. Inspirada en el pañuelico rojo sanferminero, que en Pamplona se pone con orgullo desde la alcaldesa hasta el mendigo, se puso en marcha para la renovada Aste Nagusia de Bilbao una pañoleta (de tres puntas frente a las cuatro del pañuelo) de color azul Bilbao como signo externo de la participación en la fiesta. En ellas, y con el fin de hacerlas más atractivas, se estampó un dibujo realizado para la ocasión por Juan Carlos Eguillor.
Hay discrepancias sobre el número Pantone que mejor lo representa, pero podríamos decir que su fórmula CMYK sería: 100, 72, 0, 18.